PUNCHI´S CORNER


Hablo desde el corazón y por la necesidad, como plumilla, de hacerlo. Para compartir una nota, una ilusión, un comentario. Periodista de título, con la lucha por la igualdad como profesión, pretendo compartir reflexiones y análisis de lo divino y lo humano desde la humildad de ser una persona anónima y la consciencia de que hay blogs mucho más profesionales y trabajados, aunque todos tenemos derecho a ejercer la libertad de expresión y las nuevas tecnologías lo facilitan.
Maternidad, alimentación, vida sana, moda, estilo de vida, política, cosas bonitas... Un poco de todo con afán de compartir.

miércoles, 19 de marzo de 2014

PAPÁ

Hace ya la escandalosa cantidad de 18 años que comencé mis estudios de Periodismo en la Universidad de Málaga. Mi madre, en su afán de cuidarme y ayudarme a ser una persona más feliz, me invitó a asistir a un curso sobre Control Mental bajo el título de "Método Silva".
El profesor llamado Eduardo, era una persona con unas cualidades y habilidades comunicativas extraordinarias. Entre las múltiples enseñanzas que me transmitió en ese fin de semana y el resto de veces que repetí el curso, una era la importancia de guardar el equilibrio general en la vida de una persona y que para ello, el control de tu propia mente es la mejor herramienta que puedes usar.
Pues bien, así me doy cuenta que nos pasamos los humanos toda la vida: luchando por tener equilibrio. Y la verdad es que en las épocas en que se consigue, la felicidad es casi plena.
Esta es una de las dificultades más grandes que encuentran los padres a lo largo de su desigual vida. Ellos, bajo la gran putada de tener que traer el pan a casa, se encuentran y se han encontrado tan lejos de convivir y disfrutar de cada uno de los actos de nosotros, sus hijos. Así le pasó al mío y les ha pasado a tantos. Y a día de hoy, cómo se arrepienten. Adiestro y siniestro escucho últimamente a tantos y tantos padres mayores recomendarle a mi pobre maridín que no se separe más que lo necesario de su muñequita linda. Pues ahora, con la distancia, se dan cuenta que sus hijos se les han hecho hombres y mujeres y ellos mientras, se han pasado la vida trabajando.
Todo este equilibrio tenemos que construirlo entre todos, pero lo importante es tener las ideas claras. Por eso los padres de hoy en día ahí tienen ya mucho avanzado y cada vez tienen un menor temor a ponerse el mandil y decirle al jefe de turno que se tiene que marchar a casa porque le toca estudiar con sus descendientes, o llenarse de tierra y bajarse al parque. ¡Cualquiera le decía hace 20 años eso a su jefe!
No es que vayas a querer menos a papá por el tiempo que te dedique, pero sí puedes llegar a ser mucho más feliz por esos pequeños momentos vividos con él.
Yo me acuerdo muchísimo de mi padre. Tengo frases suyas grabadas en la retina, claro está, como todo el mundo, y más él que es un refranero de tomo y lomo! He vivido con él hasta que nos hicimos mayores los dos... Lo que más me ha gustado de él siempre, ha sido su disponibilidad para jugar y reirnos. Pues no he visto yo partidos de fútbol jugando a la brisca sentada en sus piernas y comiendo patatillas! Y jugar al escondite más de una lesión física le ha costado. De él también he aprendido mucho del mundo de las chapuzas, por no hablar de la carga genética que llevo en mi persona y a mucha honra oiga! Como todas las niñas, he tenido mis momentos románticos con mi padre, me ha gustado siempre muchísimo ir dada de la mano por la calle de él. Es una cosa... En el fondo, nuestro padre es nuestro novio, no lo podemos evitar. Y confieso que me da una envidia grandisima saber que a mi hermana se le plantifica en su casa todas las semanas y comen juntos, se cuentan sus chismes, se apoyan mutuamente y se desahogan sobre sus cosicas... Pues sí, llegada a esta edad, a todas nos gusta que nuestro padre se nos siente en el sillón y te meta un ronquido que te deje sorda... jajajaja

Ahora también me siento muy emocionada porque soy la mujer del padre de Ana Belén, y lo veo ahí tan guapo y ella tan chochica con su padre buscándole por el pasillo y llamándole y partiéndose de risa con él... Supongo que se identificará muchísimo con él cuando lo mire y diga: "anda, mira, uno como yo en grande" jajaja... Qué parecido más exagerado tienen. En este año que ha pasado desde que observo enamorada la relación de Ana y Manu he visto cómo ha aumentado su amor de él por ella, es normal, a la gente se la quiere cuanto más se la trata y conoce y en la medida en que ella se ha independizado más de mí (si es que lo ha hecho) ha ido entendiendo que somos tres y ya ha comenzado a afianzar su noviazgo con su papá. Qué bonitos, Manuel y "Manuelita". Dios los guarde juntos y unidos muchísimos años y que tengan muchas aventuras y momentos románticos y de amor.


Feliz día del padre a todos los que tienen la suerte de tener un/a hijo/a. Para los que no sepan por qué se celebra en San José, haced una búsqueda ligera... es bonito el significado.

viernes, 7 de marzo de 2014

8M- NADA QUE CELEBRAR

Equivocadamente y sin querer, el 8 de marzo hombres y mujeres nos decimos "FELIZ DÍA DE LA MUJER" cuando esto es un error porque no se trata de una fiesta, se trata de un día para recordar que por más que en las leyes y las constituciones se nos otorgan los mismos derechos, a la hora de cumplirlos, no los tenemos iguales. 
Asistí el otro día a una jornada de la PLATAFORMA POR EL INFORME SOMBRA CEDAW 2015 donde unas "Brujitas Migrantes" que actuaron llevaban  razón diciendo que también se nos discrimina porque hasta incluso se nos dice cómo debemos vestir. Una incongruencia más de las mías porque soy fan de la moda y de los blogs relativos. Pero... ¡cuánta razón llevan! A caso ¿no hemos cuestionado la estética de una ministra y su belleza antes que la de un ministro? Anda que no he valorado yo veces la presentación de una mujer con cargo público cuando sin embargo estamos hartas de ver ministros y presidentes calvos y feos. Por no hablar de presentadoras y presentadores de televisión. Una carga más de las que no nos damos cuenta. Y todo el ritual del tiempo que hemos de dedicar a nuestro cuidado personal, a veces, da muuucha pereza... por eso las feministas de los años 70 se revelaban con estéticas andróginas para reclamar también la dictadura de los estereotipos físicos femeninos, qué monas somos como florero! Eso otra, casi siempre, dictaduras masculinas. Y si no, que tire una piedra una diseñadora mujer que no se sienta discriminada en el mundo de los hombres, donde los que firman las marcas son ellos, y las que cosen en las tejedoras son ellas. 
Con lo bonito que sería que juzgásemos menos y escuchásemos más los corazones... ES una lección que me gustaría autoimponerme. Con independencia del amor a la moda y la estética, me gustaría mirar más a los ojos, más al corazón. 
Ah! y desde aquí también apuntar al cerco que en algún momento también he notado en círculos más alternativos y de estética y mentalidad hippie cuando me han mirado a mí de arriba a abajo por mi indumentaria. Que las tribus y empatizar (o entrar por el ojo que diría mi madre) se produce en todos los ambientes.
Espero que no se siga cuestionando tanto a las que estamos a diario haciendo ver las cosas que quedan por hacer. Se cometen muchas injusticias, muchas diferencias que ni siquiera nosotras vemos ni detectamos. Estamos educados todos y todas en una visión machista y no lo vemos. Una orquesta perfectamente encajada para explotar a unas por el resto y que finalmente explota (valga la redundancia) en asesinatos.
De todas formas, aprovecho estos días para escuchar todas las proezas que cientos de miles de mujeres hacen a diario. También es una de las oportunidades que ofrece el 8 de marzo. Aunque ya de por sí, es una proeza ser y existir con todo lo que llevamos cada una en la normalidad adelante. En ese aspecto tenemos que aprender más de los hombres y hacer menos cosas a la vez. Espero algún día conseguirlo y quedarme simple y llanamente ensimismada mirando cómo mi hija aprende a andar o a tapar una botella haciendo encajar sus piezas. Así, saborearemos más la vida.
Feliz fin de semana de sol.